Jaime Montaner es un truficultor único. Su gran pasión han sido siempre las trufas: disfrutaba de joven yendo a coger trufas silvestres al monte, y ahora como truficultor. Su experiencia es la base de su conocimiento y la firmeza de sus ideas le ha llevado a tener una de las redes de plantaciones que más se asemejan a ir a buscar trufas al monte. ¿Quieres saber todos los secretos de un buen truficultor?
(Si lo prefieres, puedes ver la entrevista en vídeo haciendo clic aquí)
¿Cómo fueron los inicios en el mundo de la truficultura?
Antes parecía que solo con plantar los árboles ya lo tenías todo hecho… Con el paso del tiempo, ves que el clima va cambiando y tienes que hacer otras cosas a parte de cuidar los árboles, las tierras… Pero, sobre todo, tienes que encontrar agua.
¿Cómo fue tu primera experiencia con la truficultura?
Hace unos 24 años que hice mi primera plantación de trufa. Ese campo, me dio las primeras trufas a los 11 años. Con el paso del tiempo, otras plantaciones dan trufas a partir de los 4 años… El motivo es que, al principio, con menos experiencia, no trabajaba tan bien la tierra.
¿Qué es lo que más te gusta en el mundo de la trufa?
Lo que más me ha gustado a mi es ser trufero. Ir al monte. Eso era lo que me generaba pasión. Ir y conocer truferos, ir por los montes, salir con el perro y de vez en cuando ver como el perro te llevaba una trufa en la boca y después que él te llevase al árbol trufero.
¿Es laborioso iniciar un cultivo de trufas?
Lleva mucho trabajo. Desde el momento que compras el campo tienes que ver como está: si era campo yermo, se tritura la maleza, se subsuela y se siembra de cereal o de leguminosa un par de años. Si era campo de cereal, se hace un subsolado bueno, para que se meta el sol y los hielos bien adentro.
Luego ya se puede plantar y a partir de aquí lo gestionas según los criterios de cada uno. Por ejemplo, a mí no me gusta labrar. Lo que si que tienes que hacer es cuidar constantemente los árboles. Durante los 5 primeros años, las encinas no deben tener ninguna hierba.
¿Qué consejo daría a alguien que empieza con la truficultura?
A esperar hasta que te produce… y no ser ansioso.
¿Cómo has aprendido los secretos de la truficultura?
Pues a guiarme siempre de los mejores, que están situados en Sarrión, Teruel. Además, lo que siempre tienes que hacer es observar cómo es tu terreno. Es muy importante también trabajar la tierra cuando sacas la trufa, trabajar el hoyo que tú haces.
Esto es muy simple: todo lo que hacen ahora de echar sustrato y esporas ya lo hacían antes. Como había tantas, cuando las personas cogían trufas, algunas se rompían y los perros arañaban las trufas… Ya dejaban esporas en el terreno, y ya quedaba movido por si solo.
¿Durante cuantos años un árbol produce trufa negra?
En el monte he visto muchos árboles de mucha edad que dan muchas trufas … ¿Qué hacemos mal en el cultivo para que un árbol en 25 años se nos agote? No lo sé…
¿Cuál es el mayor riesgo de ser truficultor?
El mayor riesgo en una plantación trufera es no coger trufa… y todo lo invertido al garete. Aquí tú plantas un árbol y esperas 8 años. Entre tanto tienes que vallar, hacer pozos buscando agua… una inversión muy grande sin saber realmente si vas a coger trufas.
¿Qué es lo que más (y lo que menos) te gusta de la truficultura?
Lo que me gusta de ser truficultor es que has plantado unos arbolillos y estas esperando un tiempo y ellos responden, te dan trufa… es muy satisfactorio.
Lo que no me gusta de la truficultura es lo que se hace de venga aportes y criar trufas de segunda o tercera calidad. Eso no me gusta, porque estamos engañando al consumidor…
Se tiene que dejar al árbol, que ya dará sus trufas y cogerán de la tierra todos los minerales y nutrientes que necesitan para alcanzar el aroma de primera calidad.
¿Cómo empezaste a trabajar con Laumont?
Yo siempre le he vendido a la misma persona, Vicente. Hace unos años Vicente se puso con Laumont y desde ahí empezó la relación con Laumont. Donde va Vicente, ahí voy yo. Llevo 26 años en el mundo de la trufa y siempre he estado con Vicente.
¿Qué te aporta Vicente, el agente de trufas de Laumont?
Vicente, en el mundo de la trufa, és confianza. Te quiere, te cuida. Todo lo que se pierde hoy en día de los valores humanos entre las personas, Vicente te lo aporta.
¿Cómo se debe combatir el Leiodes?
El problema del Leiodes existe porque no se repasan bien las trufas. Hay gente que invierte en trampas… pero no vas a terminar con el Leiodes con las trampas. Los Leiodes se acaba repasando cada día. Cuando pasas y no sacas más trufas, el Leiodes no aparece porque solo busca las trufas maduras.
Muchas gracias por tu tiempo Jaime
Muchas gracias a vosotros